Como concepto y práctica a implementar seas pequeña, mediana o gran empresa
Desde los años noventa, este concepto ha ido tomando fuerza y evolucionado constantemente, tras la llegada de la globalización, el aceleramiento de la actividad económica, la conciencia ecológica y el desarrollo de nuevas tecnologías.

Hay organismos de carácter internacional que se encargan de delimitar, en lo posible, el concepto teórico de la RSC, cuyas directrices sirven como orientación para las empresas que se deciden a transitar por este camino. Dentro de los más destacados se podría citar a los siguientes:
Global Compact (Pacto Mundial) de Naciones Unidas
Global Reporting Initiative (Iniciativa para la Rendición de Cuentas Global)
La Responsabilidad social corporativa (RSC), también llamada Responsabilidad social empresarial (RSE) o simplemente Responsabilidad social (RS), es la responsabilidad que cada organización tiene con el medio ambiente en que se desenvuelve y con la sociedad de la que hace parte, se define como la contribución activa y voluntaria al mejoramiento social, económico y ambiental por parte de las empresas.
A menudo la RSE se utiliza para mejorar la imagen de una empresa. Sin embargo, algunos estudios revelan que no solo la imagen de la empresa mejora con la implementación de la RSE, sino que adicionalmente la política de responsabilidad social de las compañías aumenta la motivación, la productividad y el sentimiento de pertenencia de sus equipos, refuerza la atracción y retención del talento, a la vez que mejora el clima laboral.
Las empresas han comenzado a adoptar la RSC no solo como resultado de presiones de los consumidores, los proveedores, la comunidad, las organizaciones de activistas, los inversionistas, etc. sino también como una actividad estratégica adicional en la competencia comercial.
La escala CSR Scale de Turker (2009), es un instrumento validado que se ha utilizado para medir la percepción que tienen los trabajadores de si su empresa es o no una empresa con responsabilidad social corporativa. Se estableció que la satisfacción laboral está determinada por la responsabilidad social empresarial.
Sin embargo, las empresas solo deben cumplir con las leyes de protección ambiental que existen en su país, la adopción de la política de Responsabilidad Social Empresarial es todavía voluntaria. De manera que el estado, la sociedad y otros actores solo pueden decir que ven con buenos ojos la implementación de estas conductas empresariales.
Pacto Mundial
En 1999 y como iniciativa de Kofi Annan (entonces secretario de las Naciones Unidas), se lanzaron una serie de iniciativas las cuales identificaron lineamientos o principios que debían ser considerados por las empresas, para contribuir al desarrollo de la sociedad, comunidades y los mercados. Las medidas establecidas en esta iniciativa involucran temas de derechos humanos, laborales, del cuidado al medio ambiente así como medidas anti-corrupción, temas que abarcan los “Diez Principios” con que cuenta el Pacto Mundial, conocido como «UN Global Compact». Si bien las empresas no se encuentran obligadas de forma jurídica alguna a la implementación y seguimiento de dichos principios, son lineamientos que dentro de su gestión, operaciones u estrategias, deben de tomar en cuenta para actuar y cumplir dentro de un marco de Responsabilidad Social Corporativa establecido a nivel mundial.
Objetivos de Desarrollo Sostenible – ODS
En septiembre de 2015, se aprueban los Objetivos de Desarrollo Sostenible, como parte de la Agenda 2030 durante la Cumbre del Desarrollo Sostenible. Los 17 ODS y las 169 Metas asociadas, lanzados oficialmente en enero de 2016 se espera que sean el marco unificado que permita un seguimiento y progreso medible y comparable. El Pacto Mundial adoptó los ODS, unificándolos en su actuación a nivel global a sus 10 principios. Las empresas han comenzado el proceso de adaptación de sus acciones de sustentabilidad a las metas de los ODS.
